QUETTA, Pakistán.- Un poderoso terremoto de 7,7 grados en la escala de Richter que afectó ayer el sudoeste de Pakistán dejó hasta ahora 327 muertos y un nueva isla, según informaron funcionarios locales. Abdul Rasheed Gogazai, vicecomisionado del distrito de Awaran, señaló que 285 cuerpos fueron recuperados en la zona, mientras que otros 42 fueron hallados en el vecino distrito de Kech.
El terremoto fue tan fuerte que causó la elevación del fondo marino y creó una pequeña isla a unos 600 metros de la costa pakistaní de Gwadar en el mar Arábigo. Imágenes televisivas mostraron una formación rocosa por encima del nivel del mar y a un grupo de personas desconcertadas que se reunió en la playa para observar el extraño fenómeno.
El sismo se sintió hasta en la capital india de Nueva Delhi, a cientos de kilómetros hacia el este, donde los edificios se estremecieron, y también en la gigantesca ciudad portuaria de Karachi, en Pakistán, informó la agencia Reuters.
El periodista Mohammad Shabir describió escenas de desolación y caos en las localidades afectadas e indicó que los sobrevivientes estaban cavando filas de tumbas y retirando cuerpos entre los escombros. "Hasta donde los ojos permiten ver, todas las casas aquí han sido arrasadas", dijo.
El Ejército de Pakistán desplegó cientos de soldados para ayudar con las tareas de rescate por el peor terremoto en la nación del sur de Asia desde el 2005, cuando unas 75.000 personas murieron en el norte del país.